En el año 2007, iniciamos los ensayos de Breve Silbido desde el Exilio, obra que nos permitió encontrar intereses discursivos y estéticos comunes a Damián Cordero y a José Alberto Gallardo. 

 

Expandir en un sentido escénico, metafórico, orgánico y sensorial, la brevedad del instante que acontece cuando dos miradas se entrecruzan, cuando dos seres humanos se encuentran, ha dado nombre y sentido a nuestro trabajo estos años. 

 

Años en los que eso que podríamos llamar póetica -modo de hacer, discurso, lenguaje-, ha ido hallando sus cauces a partir del surgimiento continuo de necesidades expresivas, dudas estéticas y discursivas que no obstante, han ido también develando nuestra singularidad en elementos como: dramaturgias de fragmentación, actuación en crudo, indagación autobiográfica, interdisciplina, difuminación de las fronteras entre los lenguajes escénicos, la imagen como testimonio de la memoria, metáforas como miradas transversales al devenir social y político; así como ciertas características de trabajo: colaboracion con artistas de distintas disciplinas, colaboración con artistas de otras latitudes, creación colectiva. 

 

Tales inquietudes, han ido perfilando un quehacer particular que actualmente desarrolla sobre las siguientes líneas:

• Dramaturgia de fragmentación

• Dramaturgia del instante

• El actor desprovisto de artificios

• Privilegio de la carne

• Plástica del acontecimiento

• Noción de que actores y espectadores comparten el mismo espacio – tiempo

• Difuminación de fronteras entre diversos lenguajes artísticos –teatral, coreográfico, plástico, cinematográfico- en el escenario

• Potenciar relación con el espectador.